Regalar es un arte y debe hacerse con buen gusto, sentido común, sencillez y altruismo, evitando con cuidado los excesos. Un regalo debe ser una manifestación de sus sentimientos hacia una persona y, por lo tanto, no debe incomodar a quienes lo reciben.
Hacer un regalo es una situación tensa y delicada, ¡donde el error siempre puede estar al acecho! Es por eso que muchas personas optan por dar regalos con dulces, donde el margen de error se reduce considerablemente, después de todo ¿Quién no ama tener algo dulce para comer?
¿Cuál es el regalo correcto?
No es fácil definir cuál es el regalo perfecto. Debe estar hecho a medida, satisfacer el gusto de quienes lo reciben, ser útil en la medida de lo posible y, su gusto personal no debe imponerse.
También es importante saber dar un regalo apropiado para la ocasión, respetando el grado de amistad e intimidad que se tiene con la persona a quien va destinado el obsequio. Y luego, por supuesto, a sus recursos financieros.
No es cuestión de regalar cosas elegantes o dar obsequios demasiado costosos, porque se corre el riesgo de avergonzar a quienes los reciben, incluso cuando tienen que corresponder. Lo más importante es que un regalo se haga con el corazón y no a la ligera, solo porque se sitió en la obligación.
Regalos hechos en casa
Antes no se veían con buen ojo, hoy en cambio regalar algo hecho con tus propias manos, ya sea algo culinario o artístico, amplifica el valor de su obsequio. La persona lo recibirá con amor ya que es algo a lo que le has dedicado tiempo y esfuerzo. Sin embargo, es importante que sea hermoso o realmente bueno. Y que lo represente muy bien.
Tarjetas de regalo
Hoy en día, muchas tiendas ofrecen la posibilidad de comprar tarjetas de regalo o vales de obsequio. Sin duda, es un regalo de bajo riesgo, ya que el destinatario puede decidir qué llevarse a voluntad, pero debe considerar que es extremadamente impersonal. Manténgalo como un salvavidas, úselo solo en caso de emergencia (en caso de que no conozca tan bien al destinatario o cuando no pueda realizar una compra).
Siempre es preferible dar algo concreto, que pueda recordarte la atención y el placer que has puesto en ello. ¡Porque este debe ser el objetivo del regalo!
Regalos por delivery
Actualmente se pueden hacer muchas compras en línea, pero haz que te lleven los regalos a casa y luego entrégalos en persona al destinatario. También puede retirar el regalo del empaque comercial y envolverlo usted mismo correctamente, o según su gusto.
¡Qué cosas no regalar!
Hay regalos que nunca deben darse, y algunos están vinculados a supersticiones o tradiciones.
Si no se solicitan expresamente, evite dar cremas anticelulíticas, antiarrugas y depilatorias: ¡puede parecer que quiere sugerir arreglar algo más! Por otro lado, podría regalar un cupón para un centro de belleza o un spa.
También evite los electrodomésticos, como una plancha o una aspiradora: ¡tienen más el sabor de un “gracias por tus servicios” que de un regalo! Es como darle ropa a un niño que espera un juguete.
Si tienes un amigo supersticioso, nunca le regales perlas, paraguas o pañuelos, son símbolos de tristeza. Y ni siquiera te acerques a los objetos puntiagudos, como alfileres, tijeras y cuchillos, porque traen mala suerte. Si regalas una billetera, recuerda ponerle una módica cantidad de dinero dentro.
Dedicatorias
No es obligatorio acompañar un obsequio con una tarjeta o dedicatoria, pero sin duda es un gran gesto, hace que el obsequio sea aún más preciado para quien lo recibe, mucho más personal, definitivamente un bonito recuerdo para guardar.
Ahora bien, si estás enviando un regalo, entonces es obligatorio decir quien ha sido el remitente. La tarjeta o dedicatoria debe estar escrita a mano, debe tener pocas palabras pero ser muy sincera, y claro, debe estar firmada (sin títulos y con el nombre antes del apellido).
En Navidad también puedes optar por bonitas tarjetas acordes a la ocasión, quizás con un hermoso paisaje invernal o una reproducción clásica. ¡Evite enviar tarjetas con motivo de Santa Claus a menos que el destinatario sea un niño!
¿Cuándo debe abrirse un regalo?
El obsequio debe abrirse en el momento de la entrega, esto para poder agradecer con entusiasmo a quienes te lo han entregado y mostrar la satisfacción que se merece. Si, por el contrario, estás en una situación en la que no puedes abrirlo, hazlo más tarde, pero no olvides llamar inmediatamente a la persona que te lo dio para agradecerle.
Cuando recibes múltiples obsequios, de varios invitados, en un cumpleaños por ejemplo, nunca abras todos los obsequios juntos, esto es para evitar que la persona que ha hecho un pequeño regalo pueda sentirse incomoda o mortificada.