¿Cómo determinar el valor de una empresa?

Las empresas son un activo muy importante para el patrimonio de cualquier persona. Por esa razón, determinar cuál es su valor es muy importante, especialmente si vas a venderla.

En muchos casos los dueños de empresas se ven en la necesidad de venderlas. Esto no necesariamente significa que esta se encuentre en bancarrota o esté pasando por un momento difícil. La venta de un activo puede darse por muchos motivos, ya sea porque no se desea seguir en esa actividad, un mejor negocio o cualquier otro motivo.

Es por ello que si estás buscando conocer el valor de una empresa para comprar o vender. En este post hablaremos un poco sobre ello y cómo puedes realizar una valoración rápida. Si bien estas no son del todo exactas, sirven para tener una idea bastante acertada del valor de la misma.

¿Son efectivos estos métodos?

Estos métodos que t explicaré a continuación no son para determinar el valor real de una empresa o marca. Esto te arrojará un valor aproximado de en cuanto podría estar valorada tu empresa.

Estos son métodos rápidos pero no te darán un valor exacto, ya que esto solo puede hacerlo un especialista en la materia.

Si estás buscando conocer el valor exacto necesitarás contactar con un especialista que realice un avalúo profesional. Ellos son los únicos que podrán darte el valor real y además darte un certificado de eso.

Método contable

Este es un método que se utiliza muy frecuentemente y además es de los más eficaces y certeros. Para poder aplicar este método necesitarás tener acceso a los datos de la contabilidad de la empresa. Si vas a comprar es posible que no puedas tener acceso a esa información tan sencilla. Sin embargo, puedes llegar a un acuerdo con el vendedor para que te los facilite.

Una vez tengas todos estos datos podrás empezar a realizar las operaciones matemáticas necesarias. Para empezar deberás tomar el monto total de los activos de la empresa y totalizarlos. Harás exactamente lo mismo con los pasivos y cuando tengas ambos totales deberás restar los pasivos a los activos.

El resultado de esta operación será el valor real de tus pasivos. Ya con estos datos tendremos una gran parte del trabajo realizado.

Ahora necesitarás sacar el promedio de ventas de tu empresa y el resultado deberás sumarlo al resultado anterior. Por ejemplo, si tus activos son de 100.000 euros y tus pasivos son 30.000 euros, esto quiere decir que el valor real de tu activo es de 70.000 euros. Si a eso le sumamos que el promedio de facturación es de 100.000 euros el costo aproximado de venta de la empresa es de 170.000 euros.

Método de cálculo de beneficios

Este método suele utilizarse principalmente para la venta de sitios web o empresas tecnológicas. Este método es aún más sencillo que el anterior y requiere menos información. 

Para llevar a cabo este cálculo tan solo necesitaremos conocer cuánto es el beneficio promedio que tiene mensualmente. Una vez tengamos ese monto, deberemos multiplicar ese monto por 10 o 12. Esto debido a que generalmente se utiliza el valor promedio del año, es decir 12 meses.

Por ejemplo, si tus beneficios son de 1.000 euros al multiplicarlo por doce, tendremos que el valor del sitio es de 12.000 euros.

Como vez es bastante simple, pero claro, este método se aplica principalmente para comerciar con sitios web que no cuentan con infraestructura.

Estos dos no son los únicos métodos que existen para poder valorar una empresa. Pero son los más comunes, sin embargo, reiteramos que si quieres conocer el valor exacto y real de tu empresa deberás contratar a un profesional para que realice el avalúo.

Conclusión

Valorar una empresa es un proceso completo y que toma tiempo, es por ello que estos métodos se utilizan principalmente como referencia. Estos resultados no deben tomarse como un valor absoluto.

Un equipo profesional y experto en temas inmobiliarios podrá ofrecerte un análisis profundo y certero con respecto al valor real de tu empresa. Si está pensando en vender, esta es tu mejor opción. Así podrás evitar perder dinero por haber realizado una valoración más baja del precio real de la empresa.

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